Desde pequeños estamos sometidos a la misma lluvia de ideas.
Ideas que pensábamos repetir en nuestro camino de educadores. Pero ya no.
Demasiadas ideas en nuestra cabeza, ideas equivocadas,
experiencias equivocadas, prejuicios equivocados… hay que cambiar. Hay que
cambiar absolutamente todo, empezando por los profesores.
Tal y como se muestra en la foto, el profesor adoctrina a
los niños. Los adecúa a su pensamiento.
El educando tiene que adecuarse a la manera de pensar del educador,
y NO al contrario.
(Evidentemente, DEBERÍA ser al contrario).
Escuelas con métodos tradicionales por doquier.
¿No sería mejor abandonar de una vez por todas estas
ideologías anticuadas y sin ningún futuro? Claro, pero pocos y pocas se atreven
a hacerlo.
Los niños necesitan otra
metodología. Necesitan profesores renovados, escuelas nuevas.
Necesitan otra manera de evaluar
conocimientos.
Hay niños realmente
extraordinarios, con cualidades increíbles. Y que a causa de los métodos
tradicionales utilizados, para los profesores son “los zoquetes” de la clase
(tal y como los llama Pennac en su libro “La
mala escuela”).
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